Querida Michelle :
Hace año y medio de que decidiste seguir por la religión, obviamente que esto ha hecho que las miradas de los que afectivamente estamos ligados a ti, te hayan caído de golpe, seguramente la mayoría de ellas recriminándote por caminar en tierras que no alcanzamos a ver, creo que ni siquiera podemos imaginarlas.
La semana pasada en tu tiempo de vacaciones viniste a nuestra casa dos días, al ver tu cara llena de vida y recordar la alegría con la que siempre has vivido, sentí que dentro de ti existe una duda, siento que no puedo dejar pasar esta oportunidad para expresarte lo que traigo adentro.
Quisiera que tomaras esto como las reflexiones de alguien que está un poco loco como tú y que también sueña con encontrarse a Dios en el camino y andar con él su sueño.
Para mí las religiones son sólo una herramienta de conexión entre Dios y la razón humana, nos enseñan cómo debemos de vivir y eso es muy bueno, nos dicen la manera de permanecer cerca de Dios, sin embargo, no nos dicen cómo podemos estar con él.
Yo creo que Dios está mucho más allá de las normas religiosas, que muchas veces lo único que logran es hacernos vivir los mandamientos por miedo a las represalias, siempre con la culpa sobre los hombros, yo de verdad mi querida Mich, creo que por ahí no anda el jefe.
Para mí Dios está en el cielo que veo, no el que no comprendo, sino el que tiene nubes y de vez en cuando me regala un atardecer bellísimo, está en la música que escucho y que rompe en mis oídos llenando de alegría todo mi ser, está en el trabajo que me llena de ilusiones y algunas veces angustias, las dos llenas de vida o presencia de él, también lo veo en la deforestaciones de nuestros bosques pidiéndome que haga algo por detener esa masacre, lo encuentro en la contaminación del agua y siento la necesidad de luchar por regresar la armonía a nuestros ríos y lagos que al igual que nosotros son parte de él.
Hace año y medio de que decidiste seguir por la religión, obviamente que esto ha hecho que las miradas de los que afectivamente estamos ligados a ti, te hayan caído de golpe, seguramente la mayoría de ellas recriminándote por caminar en tierras que no alcanzamos a ver, creo que ni siquiera podemos imaginarlas.
La semana pasada en tu tiempo de vacaciones viniste a nuestra casa dos días, al ver tu cara llena de vida y recordar la alegría con la que siempre has vivido, sentí que dentro de ti existe una duda, siento que no puedo dejar pasar esta oportunidad para expresarte lo que traigo adentro.
Quisiera que tomaras esto como las reflexiones de alguien que está un poco loco como tú y que también sueña con encontrarse a Dios en el camino y andar con él su sueño.
Para mí las religiones son sólo una herramienta de conexión entre Dios y la razón humana, nos enseñan cómo debemos de vivir y eso es muy bueno, nos dicen la manera de permanecer cerca de Dios, sin embargo, no nos dicen cómo podemos estar con él.
Yo creo que Dios está mucho más allá de las normas religiosas, que muchas veces lo único que logran es hacernos vivir los mandamientos por miedo a las represalias, siempre con la culpa sobre los hombros, yo de verdad mi querida Mich, creo que por ahí no anda el jefe.
Para mí Dios está en el cielo que veo, no el que no comprendo, sino el que tiene nubes y de vez en cuando me regala un atardecer bellísimo, está en la música que escucho y que rompe en mis oídos llenando de alegría todo mi ser, está en el trabajo que me llena de ilusiones y algunas veces angustias, las dos llenas de vida o presencia de él, también lo veo en la deforestaciones de nuestros bosques pidiéndome que haga algo por detener esa masacre, lo encuentro en la contaminación del agua y siento la necesidad de luchar por regresar la armonía a nuestros ríos y lagos que al igual que nosotros son parte de él.
Creo que Dios está con los pobres, pero estoy seguro que ya se canso de verlos quejarse, siempre volteando arriba para pedir y nunca al frente para caminar, también creo que está con los ricos y seguro ya no quiere verlos ignorándolo, nunca volteando abajo por soberbia, pidiendo sólo cuando cae una desgracia.
Veo a Dios queriéndonos libres de prejuicios, envidias, ajenos al dolor que el tiempo pudo habernos heredado, disfrutando la vida y el mundo por sobre todas las cosas, lo veo envuelto en nosotros guiándonos por el camino, sin repartir culpas, libre como una pluma en el aire, siempre feliz, queriendo que nos integremos a su fiesta, donde no hay lugar para sentirse culpable por nada, respetando todos su ley por amor, libres de miedo.
Sabes, no tengo la menor duda de que la tierra prometida es este mundo, lo que sí, ya necesitamos darle una escombradita, misma que no vamos a lograr si no es con la ayuda de todos, cristianos, musulmanes, budistas, ateos, ricos, pobres, porque sabes, todos somos hijos de Dios.
Michella, te deseo que donde decidas seguir tu camino esté Dios contigo y siempre puedas andar su sueño.
Luis
Veo a Dios queriéndonos libres de prejuicios, envidias, ajenos al dolor que el tiempo pudo habernos heredado, disfrutando la vida y el mundo por sobre todas las cosas, lo veo envuelto en nosotros guiándonos por el camino, sin repartir culpas, libre como una pluma en el aire, siempre feliz, queriendo que nos integremos a su fiesta, donde no hay lugar para sentirse culpable por nada, respetando todos su ley por amor, libres de miedo.
Sabes, no tengo la menor duda de que la tierra prometida es este mundo, lo que sí, ya necesitamos darle una escombradita, misma que no vamos a lograr si no es con la ayuda de todos, cristianos, musulmanes, budistas, ateos, ricos, pobres, porque sabes, todos somos hijos de Dios.
Michella, te deseo que donde decidas seguir tu camino esté Dios contigo y siempre puedas andar su sueño.
Luis